Vislumbré tu fresca mirada en medio de una mañana
donde la luz radiante del sol armonizaba tu entorno.
En mi mirada estaba escrito tu nombre,
el del caballero que me haría feliz, de tu mano caminaré.
Tus rizos escarlatas vertidos en la expresividad de tu rostro
angelical, sofocaron mis pasiones.
Pasiones ocultas a la luz del día a las noches junto a ti,
son viajar a un mundo de paz, donde todo es amor, donde la
vida es maravillosa.
La blanca piel de tus mejillas y el candor de tus labios me
encauzaron en el sueño de la mujer deseada.
Serás mi cielo amado hombre moreno, dulces amaneceres
junto a ti espero besos de plata caricias de miel, amor eterno
te daré.
Me perdí en el aroma de tu piel, en las desmedidas caricias que
a segundos brotaban .de nuestros cuerpos deseosos
Amarte es lo que más deseo entre las sombras de la noche a la luz
del día, entregarte mi vida hacerte el más feliz cada día.
Sumergidos en el deseo aunamos nuestra piel. Esplendidas sensaciones
emergían bajo el palpitar incesante de nuestros corazones.
Sentirte junto a mí es rozar el cielo con los dedos, soñando estar a tu lado
hasta que la vida de mi se aleje.
Besos interminables labios húmedos jugueteo de lenguas desaforadas
fueron el preludio del éxtasis que cubría el manto de nuestro encuentro.
El comienzo de un camino de dos corazones solitarios que el destino unió
amándose locamente sin pensar en nada más.
Camino interminable que recorro asido de tu mano y que pido al cielo
sea eterno.
Juntos por siempre en este mundo y el más allá amarse así no tiene
final
©Derechos reservados Pocho Peñaredonda.Magda Jardí
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